ORIAN BRITO PEÑA | EL UNIVERSAL
A juzgar por los sangrientos sucesos que cada mes ocurren en cárceles venezolanas y revisando la actuación de la ministra Iris Varela, no hay duda que la irresponsabilidad constituye el pilar fundamental al momento de enfrentar situaciones graves. Lo ocurrido hace más dos años en la cárcel de El Rodeo, donde el único responsable fue Globovisión, significó el primer escalón de la magnitud del problema penitenciario en revolución, donde el retardo procesal, las drogas, las armas (negadas por la ministra), y la maldad hicieron un monstruo inocultable el cual nadie puede controlar.
Los criminales peligrosos tienen más poder en los recintos penitenciarios que las propias autoridades, algunos pueden salir a pasear u organizar una gran celebración para el fin de semana, en donde se pueden contratar artistas, bailarinas exóticas e ingresar bebidas alcohólicas para amenizar la fiesta ¿en qué país con un poco de racionalidad se permitirían estos beneficios? Pero no sólo rumbas se planifican en las cárceles, sino que muchos de los secuestros o extorsiones que se ejecutan en el país son controladas desde los penales, donde además es permitido el uso de teléfonos celulares, por supuesto, si se paga una alta comisión al pran (delincuente que controla áreas de la cárcel). La respuesta de la ministra frente a esta realidad o cualquier otra, es desestimar cualquier irregularidad, pero horas después ocurren sucesos que derrumban la mentira.
El 7 de agosto, Varela durante la instalación del plan Cayapa en Yare indicó que "en las cárceles del país no hay armas, se han desarmado todos los lugares y la violencia se contrarrestó". Sin embargo, el 16 de agosto se produjo un motín en la Cárcel Nacional de Maracaibo, que dejó un saldo de 16 fallecidos y una cantidad no precisada de heridos. El motivo del enfrentamiento fue por la toma del poder en el recinto penitenciario, por parte de "El Mocho Edwin", quien ingresó de forma violenta a las zonas conocidas como Procemil Patio y a Reeducación para apoderarse de esas zonas, lo que desató la disputa entre su banda y la de "El Ric", pran de Procemil.
Pero el cinismo no es exclusivo de la ministra, de acuerdo a una nota del diario El Universal, "Edwin Ramón Soto Nava conocido como "El Mocho Edwin'", pran y hoy en día máximo líder de la Cárcel Nacional de Maracaibo, indicó en unas breves palabras a las afuera del recinto, que no está previsto su traslado a ningún otro centro penitenciario y eso ya estaría conversado con la ministra Iris Varela". ¿Desde cuándo un delincuente puede negociar con la "autoridad"? Si con sensatez se manejara la situación, la ministra Varela habría renunciado hace tiempo, su rol al frente del Ministerio del Poder Popular para Asuntos Penitenciarios, ha dejado más muertes, impunidad y fallas que se le escapan de las manos, frente a la ausencia de contraloría o superiores que impongan el orden, Iris seguirá becada en el ministerio.
@OrianTw
