miércoles, 3 de julio de 2013
La traidora de María Corina. Por Alexander Cambero
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ALEXANDER CAMBERO | EL UNIVERSAL
El régimen en su desesperación enfila las baterías en contra de María Corina Machado. Su brillante participación como parlamentario, siendo una contundente voz en medio de sórdidos personajes del tradicional ambiente político nacional, ha servido para mostrar un talento que despunta como protagonista estelar de la Venezuela por venir. Algunos de los más importantes escenarios legislativos del continente han escuchado sus palabras denunciando la dramática situación nacional. Con gran contundencia a develado al mundo todo lo que ocurre en la patria secuestrada por los oportunistas. Este significativo hecho hace sonar las alarmas gubernamentales, por lo cual han arreciado los ataques frente a la valerosa mujer que no se deja amedrentar.
Ahora el gobierno venezolano le endosa el remoquete de traidora a la patria. Es risible que quienes le han entregado nuestro futuro al imperio chino y regalado nuestros recursos a una buena cantidad de países maulas, tengan el tupé de hablar en estos términos. No existe en el mundo una administración que haya traicionado más a su pueblo que esta que se ampara en unas ideas retrógradas y absolutamente reñidas con el desarrollo democrático. Han malbaratado incalculables fortunas para solucionar los problemas de otros, en menoscabo de nuestro futuro. ¿Cómo se llama eso? Nicolás Maduro es simplemente un títere de intereses foráneos que gobiernan desde Miraflores sin el mayor rubor. ¿Acaso nuestra independencia lograda a sangre y fuego por valerosos venezolanos, planteaba que teníamos que entregar nuestra soberanía a otras naciones en nombre de la revolución?
La inquina personal del régimen para con María Corina Machado es la triste confesión de la impotencia, la diputado se crece en las dificultades llamando a las cosas por su nombre y sin temer a retaliaciones de cualquier tipo. Por ello no es criticable que en cualquier momento pueda discrepar de las decisiones de la MUD, este órgano político no es la Sociedad De Los Caballeros Templarios quienes nacieron para salvaguardar los tesoros de la iglesia antigua, ocultando en algún oscuro lugar al Santo Grial. Tampoco es una secta secreta en la Inglaterra medieval en donde solo se acataba la decisión del predestinado. En la mesa democrática existen diversos pensamientos ideológicos que discuten profundamente hasta lograr converger en una idea que los sume a todos. Delante de los intereses particulares resplandece el bien de la nación. Si la MUD fuera un cenáculo en donde solo prevalece el criterio omnipotente de un hombre, su razón de ser estaría en serias dificultades. Lo hermoso de la gesta unitaria es que avanza con paso firme en la diversidad, definitivamente los demócratas son distintos al abominable engendro que es el PSUV. Con sus múltiples desviaciones morales que son conocidas por todos. Las naciones prosperan cuando existe un debate que clarifique las mentes y oriente un derrotero, de lo contrario las naciones volverán una y otra vez a seguir aplaudiendo a bandoleros de palabras hermosas, dirigentes de oropel quienes buscan el resplandor de los tesoros. Delincuentes disfrazados de benefactores del pueblo cuando en realidad son su peor carcelero.
El nefasto Jorge Rodríguez presentó un audio que buscaba incriminar a María Corina Machado. Horas después el búho de alas alicaídas era puesto en su sitio de manera magistral, al igual que el inefable ministro de Información, Ernesto Villegas. Pensaron que lograrían intimidarla, se olvidaron que hasta Hugo Chávez fue demolido por María Corina cuando le dijo qué: "expropiar era robar". El Presidente caído balbuceaba asustado ante el ímpetu de una valiente mujer que lo puso en su sitio. Seguramente el recuerdo de aquel episodio, en donde se mostró que el supuesto gigante estaba sostenido por pies de barro, hace que quieran cobrarle la gran rabieta que agarró el difunto.
AlexanderCambero@hotmail.com
@alecambero
