THAYS PEÑALVER | EL UNIVERSAL
En 2013 a los socialistas se les cumplieron casi todos los deseos. El "deseo socialista" de impulsar la nacionalización colectivizada arrasó con las exportaciones minerales de Venezuela que llegaron en su día a los 3.561 mm de $ (caps. 72-81) y hoy apenas alcanzan los 800 millones, los 689 millones de $ que exportábamos de alimentos quedaron reducidos apenas a treinta y seis (36) millones. Y de los 1.086 millones de exportaciones de la industria mediana (caps. 35 al 71) terminamos exportando unos insólitos veinte (20) millones. Para que encima se les diga hoy que "no producen ni un dólar" luego de que arrasaron con ellos, lo mismo que el sector hotelero, que de recibir cerca de 400 millones de dólares en turismo, hoy apenas reciben 118,1 millones. Y a esto hay que sumarle que entre 2006 (pág. 2) y 2012 (pág. 89) los reportes de gestión financiera de Pdvsa nos dan cuenta que dejó de exportar 170 mil barriles y que nuestros socios en la Faja dejaron de exportar 270 mil barriles mientras el resto de la OPEP colocó 4 millones en el mercado e Iraq venderá 3,5 millones en 2014.
El "deseo socialista" de colectivizar el campo se les cumplió y terminó con 77 mil unidades de producción cerrando de acuerdo al propio censo, es decir que se marcharon del campo y Venezuela que garantizaba 2.400 calorías importando 1.500 millones de dólares en comida, hoy logra las 3.000 calorías gracias a la masiva importación de 8.113 millones de $ (caps. 1-23). Y así Venezuela tuvo que importar 70 mil millones de dólares en alimentos, 76 mil millones de dólares en productos petroleros (BCV). Los productos farmacéuticos que se producían localmente ahora también se importan y pasamos de requerir 500 millones de dólares a 3,500 millones para garantizar las medicinas y así Venezuela se quedó sin producir un tornillo y por supuesto sin dinero, aunque compartimos con Bielorrusia el haber roto el récord de impresión de dinero sin respaldo con un 200% de billetes (Chile imprimió 36%).
Para colmo, los venezolanos escuchamos que "Brasil dará facilidades a Venezuela en el pago de su deuda" que "extraoficialmente llega a los 3.100 millones" (Europa Press) y son "1.200 millones de dólares los que se adeudan a importadores de Panamá". El asunto es más complejo cuando el Senado de Colombia discute con el ministro de Hacienda a ver si "con bonos de Pdvsa Venezuela pagaría su deuda a Colombia" (Senado) y explica que hay una deuda antigua de 800 millones que aún no se ha pagado.
Vemos que los japoneses, furiosos, suspenden "el envío de material de ensamblaje", explicando que es "producto de la deuda acumulada" porque la deuda con las ensambladoras, según expertos alcanza otros $2 millardos (Venamcham) y las líneas aéreas amenazan con dejar de funcionar porque Cadivi les adeuda otros 2,5 millardos. Mientras se le debe a cada santo una vela, Venezuela afrontará el pago de 6,3 millardos de dólares del servicio de la deuda externa y el Banco Mundial (Ciadi) sentencio a favor de la Conoco y la Exxon por lo que la cifra que habría que pagar en 2014 tendrá proporciones nunca antes vistas en nuestro país. Seguramente el Gobierno se negará a pagarla y de ser así los primeros intentarán quedarse con parte de nuestros activos en el exterior.
Y como en Macondo las vacas paren de a tres, veremos que la era del dinero fácil (estímulos monetarios) en Estados Unidos se acabará, la independencia petrolera comienza a ser un hecho, el mercado está saturado, en paz y expertos como Marcelo Giugale, director del BM, ha lanzado ya la advertencia explicando que lo mismo nos pasó en 1980 con el petróleo (Bloomberg). Los analistas de Citi establecen que el superciclo terminará y que las "campanas de la muerte" de las materias primas se oirán a finales del 2013 (Forbes). Por eso los chilenos que vendían su cobre a casi 4,70 dólares piensan que convergerá en 2,90 en 2014 (Mercurio). El hierro se desplomó en un 40 y quien compró oro a 1.900 dólares está perdiendo casi 600 a la fecha en la que escribo este artículo. Y así con todo.
Mientras el mercado negro dominará toda la economía, que los expertos dicen se contraerá con una inflación desbordada, enero comenzará con los centros comerciales vacíos y con los importadores pagando, como en el póker, solo por ver y Deustche Bank nos explica que el último en caer, siempre es el oro negro, haciendo una predicción de 80 dólares para 2014 (Bloomberg).
En la fábula de Esopo de "El anciano y la muerte" hay dos moralejas que se pueden aplicar al chavismo en 2013. La primera que de tanto llamar a la muerte con aquello del patria, socialismo o la que te conté, ésta se presentó y satisfizo la petición. Tarde se dio cuenta el chavismo que la muerte era una de las tres opciones que imploraban y terminaron en 2013 lógicamente desesperados pidiendo un minuto más de vida. Por eso la segunda gran moraleja del 2013 es que: "hay ocasiones en que nos lamentamos, cuando nuestros deseos se cumplen".
Aun así les deseo un Feliz Año Nuevo (felicidad circunscrita claro está, en los valores, el amor, la familia y la salud, porque el resto lo tenemos crudo).
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