Otro Blog del Grupo Noticias en Tweets »» Sígueme en Facebook Sígueme en Twitter Síguenos en Instagram Suscríbete a NT Youtube Suscríbete Gratis Síguenos en Google +

lunes, 26 de octubre de 2015

Escenarios electorales. Por José Antonio Gil Yepes


Un marco de referencia complejo y todavía impredecible

JOSÉ ANTONIO GIL YEPES | EL UNIVERSAL

Si las reglas para elegir diputados fuesen tan sencillas como la que rige la elección presidencial (quien saca más votos populares, gana la elección), ya sabríamos que la Unidad Democrática tendería a sacar una amplia mayoría de diputados dado a que el mejor predictor de votos totales es el nivel de aprobación de gestión del Presidente. Si Maduro está en 21%, los candidatos oficialistas recibirían cerca de esa proporción.

Sin embargo, esta tendencia puede variar debido a múltiples factores: Primero, la abstención no se reparte equitativamente. El 75% de los oficialistas dice estar muy seguro de ir a votar, mientras que, por ahora, el 66% de los opositores tiene esa disposición. Esta diferencia le daría al oficialismo unos 5 puntos más de votos. Segundo: hay terceros candidatos de cada lado y esas candidaturas ponen las intenciones de voto en 62% pro oposición, 5% independientes y 33% oficialismo. Tercero: según la Constitución y el CNE, cada estado debe elegir, al menos, 2 o 3 diputados; sin importar el tamaño de la población. Esto hace que los estados de mayor número de habitantes cedan diputaciones mientras que los pequeños quedan sobre representados. Hasta aquí no pasaría nada si las intenciones de voto no estuviesen asociadas al tamaño de los centros poblados. Pero sí lo están: el chavismo tiende a tener mayor ventaja a menor tamaño de los centros poblados. Por ejemplo, en Tucupita 55.000 votantes eligen un diputado, mientras que en Chacao lo hacen unos 320.000 votantes.

Hasta aquí, las cosas son justas o legales. Pero otros factores marcan ventajas para el gobierno: no aceptación de observadores internacionales, inhabilitación de candidatos estrellas de la oposición, creación de 1.000 centros adicionales de votación, imposición tardía de paridad de género, control de la transmisión de datos, diseño confuso del tarjetón, bloqueo de la frontera, operación galope con recursos públicos y el gerrymandering. Además, el gobierno puede tomar medidas económicas que mejoren su aprobación de gestión. Sin duda, un marco de referencia complejo y todavía impredecible.

@jagilyepes


Recibe nuestras actualizaciones por E-Mail. SUSCRÍBETE GRATIS AQUI


Qué Opinas?