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martes, 19 de noviembre de 2013

Felisa Micelli, la asesora de Maduro. Por Víctor Salmerón


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VÍCTOR SALMERÓN | EL UNIVERSAL

Acorralado por la quinta inflación más alta en la historia del país desde 1950, que incluye un sideral incremento en el costo de los alimentos de 70% en los últimos doce meses, Nicolás Maduro, se dispone a reeditar la tesis que Felisa Micelli impulsó en Argentina: frenar el vuelo de los precios controlando la ganancia de las empresas.

Felisa Micelli empuñó las riendas del Ministerio de Economía en Argentina desde el primero de julio de 2005 hasta el 16 de julio de 2007, cuando una bolsa repleta de dinero fue encontrada en el baño de su despacho.

Su tesis para contener el despegue de la inflación consistió en que no había que regular los precios, sino las ganancias de las empresas, porque las compañías argentinas obtenían mayores beneficios que en Europa y Estados Unidos.

¿Le suena conocido? Recordemos lo que dijo Nicolás Maduro el pasado jueves: "Quiero que me den poderes habilitantes para dictar un conjunto de leyes que limite la ganancia y evite la especulación del capitalismo parásito contra el pueblo. Para frenar pero ya, esa práctica (...) en EEUU la ganancia está entre 10% y 15%".

Analistas argentinos como Roberto Cachanosky advirtieron que "las tasas de rentabilidad entre diferentes países no son comparables si los riesgos de inversión no son iguales".

Es decir, en los países como Argentina y Venezuela donde de un día para otro se pueden cambiar las normas laborales, decretar controles de precios, prohibir exportaciones, limitar el acceso a las divisas para importar materia prima, solo habrá inversión si se obtiene una alta rentabilidad.

Este aspecto es clave porque uno de los grandes problemas que enfrenta la economía venezolana es la mínima inversión privada, nacional y extranjera, en áreas distintas al petróleo. Por lo tanto, más que controlar la ganancia lo aconsejable sería disminuir el riesgo.

Además, surge el problema de que si una empresa es eficiente y rebaja sus costos, pasa a obtener mayores ganancias. ¿Entonces la castigarían?

Otro aspecto a tomar en cuenta es que si el Banco Central emite dinero sin respaldo en grandes cantidades para financiar a empresas públicas y se controla el valor de una lista de productos, quienes fabrican estos bienes no pueden aumentar los precios, pero sus costos de producción aumentan paso a paso.

Roberto Cachanosky señala que "es así como el Estado tiene que controlar todos los precios. No sólo los determinados bienes finales, sino también los insumos que permiten fabricar esos bienes. En definitiva, tendrían que controlar todos los precios de una economía, una política de imposible cumplimiento, que, cuando se intenta, termina controlando la vida de los habitantes de ese país".

Al parecer este es el camino que quiere transitar Nicolás Maduro, extender el control de precios, maravillado por la tesis de Felisa Micelli.

En este momento Venezuela y Argentina son los países con la mayor inflación de América Latina. ¿Tendrá que ver con el modelo?

@vsalmeron


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