TOMÁS SOCÍAS | EL UNIVERSAL
Tradicionalmente, el país siempre ha arrancado a partir de mediados de enero, debido, principalmente a las vacaciones colectivas que muchas empresas tienen desde finales de diciembre. Por ello, afirmamos que ese puede ser el motivo de que algunos negocios aún permanezcan cerrados.
Sin embargo, en Venezuela está ocurriendo lo que jamás había ocurrido y se puede evidenciar en las colas, los anaqueles vacíos y los negocios cerrados. Una mezcla de ingredientes que no pueden sino generar angustia en la población y así es.
Es necesario que el país arranque y una vez que ocurra esto, poco a poco se irán solucionando los problemas más graves que son la falta de divisas y el desabastecimiento.
No se trata de que estemos pecando de ingenuos y que no queremos ver lo que pasa. No es así, porque precisamente, en esta tribuna nos hemos caracterizado por decir lo bueno y lo malo, sobre todo con relación a las decisiones y políticas gubernamentales.
Además, las dificultades las sufrimos en carne propia, pues igual que todos soy un ciudadano, tengo familia, amigos y conocidos que están pasando trabajo, por la escasez y el alto costo de los pocos productos que se encuentran.
Para que el país arranque son necesarias y urgentes las medidas económicas, principalmente las que tienen que ver con la materia cambiaria y en eso está trabajando el Ejecutivo. De allí que se hayan anunciado que se tomarán correctivos a mecanismos de asignación que hasta ahora no han funcionado.
La causa principal del desabastecimiento es la falta de divisas, pues el acceso a las mismas ha sido restringido desde hace meses y el Ejecutivo no lo puede negar. A ello se suma la baja en los precios del petróleo y es la causa de la gira presidencial que, según el propio Nicolás Maduro, dará sus frutos.
Creo que hay que tener un poco de paciencia para ver que se concreten los acuerdos a los que ha llegado el Mandatario. Siempre con el añadido de que deseamos darle el beneficio de la duda al jefe del Estado, pues nadie puede creer que un Presidente quiere el mal para su país.
En el Ejecutivo están adelantando los mecanismos para reiniciar el otorgamiento de dólares para los sectores, ahora que se hicieron algunos ajustes que el propio presidente Maduro irá anunciando.
Sabemos que pronto comenzará nuevamente a fluir el acceso a los dólares, lo que solucionará, al menos en un principio, el problema del abastecimiento.
La asignación de divisas se ha tardado, porque, repito, se elabora una nueva estructura de control de cambio que anunciará el Presidente para poder hacer las solicitudes de este año. De hecho, muchos empresarios han realizado sus solicitudes para el primer trimestre, a 6,30 bolívares por dólar, para que vayan avanzando, mientras el Ejecutivo decide si se mantienen en ese tipo de cambio o hay un ajuste hacia el Sicad I.
Insisto en que el desabastecimiento se irá solucionando y es necesario llamar a la gente a la calma. Pero también al Ejecutivo, pues no se debe tildar de delincuentes a los comerciantes, ni lanzar la matriz de opinión de que en las colas hay desestabilización, porque realmente los ciudadanos están sufriendo.
Los sectores productivos tienen productos para varios meses, unos por varias semanas y en otros de 45 días, pero en todo caso con las decisiones que tome el Presidente es posible que se pueda abastecer al país antes de finalizar febrero.
No es lógico que se quiera perjudicar al pueblo, porque allí está la base y la aceptación que el Mandatario mantiene y, aunque ha bajado, se puede manejar muy bien.
Analista político y económico
tsocias@cantv.net
